Lady Ann entro en casa. Se quitó el abrigo y entró en la habitación de Chloe.
-Vístete. Tienes 10 minutos. Nos vamos.
Chloe se levanto corriendo de la cama,fue al armario y escogió rápido la ropa. Se dio una ducha fugaz y se vistió. Un poco de maquillaje suave,unas gotas de perfume y se presentó delante de su Ama.
-Perfecta. Bonita falda Chloe. Desabróchate un botón de la camisa. Que se vea el escote tan bonito que tienes.
-Si Ama.
Se pusieron los abrigos y salieron a la calle. Era otoño y el frío hacia que a Chloe se le erizaran los pezones al roce de la camisa. Lady Ann la miró y sonrió.
Llegaron al local donde Lady Ann había quedado con mas gente. Era oscuro;apenas podía discernir donde estaba la gente ya que la luz era muy baja. Pero debía de haber bastante gente pues oía voces por todos los lados.
Lady Ann se paró a saludar a varias personas que estaban haciendo círculo alrededor de una sumisa a la que estaban usando de mesa.
-Bonito mesa os habéis buscado Ricardo. Y ese culo esta pidiendo a gritos unos azotes.
Lady Ann se puso a la espalda de la sumisa y le dio unos azotes en ese culo tan dispuesto. Con el vaivén estuvo a punto de derramar las bebidas que posaban sobre ella pero su orgullo hizo que se mantuviera firme.
Lady Ann cogio a Chloe de la mano y la llevo hasta un lateral del local donde había una cruz y un potro. Alli le presento a un tal Master David. Chloe intuía que iba a ser prestada así que complaciente beso la mano del señor.
-Bien Chloe. Ya sabes para que hemos venido. No eres tonta. Obedece y todo saldrá bien.
-Si Ama.
El Master se acerco a Chloe y le ordenó que se desnudara y colocara en el potro.
Chloe,con las manos temblorosas,se deshizo de su atuendo y con su alma desnuda se coloco en el potro.
El Master le acaricio las nalgas con la cola de un látigo. Eso la hizo estremecer y excitar. Su piel se tornó de gallina y su sexo empezó a humedecerse.
De pronto,varios latigazos estallaron contra su espalda. La pillaron desprevenida y soltó varios gritos de dolor.
Sus nalgas también recibieron varias caricias de las cadenas de metal de un flogger personalizado. Varias marcas sangrientas se quedaron grabadas en su piel blanca. Aguantó los golpes con lágrimas en los ojos,y aunque le provocaban un dolor tremendo,en el fondo le gustaba . Era parte de la entrega a quien su Ama había confiado su tesoro.
Con la resaca de los restallidos aún en su mente,Master David le acarició con su mano dura su sexo,rozando a la vez su miembro contra sus nalgas.
Chloe estaba excitada y a la vez desesperada por sentirse usada en toda su plenitud.
Lady Ann coloco un futon alto entre medias de las patas del potro. Se tumbo y mostró su sexo a la cara de Chloe. Quedaba a la altura de su boca,que andaba deseosa de el cada minuto del día.
-¡Chúpamelo perra! Tu deber es darme placer.
Chloe,ansiosa,empezó a lamer cada centímetro de ese anhelado manjar.
Sin esperarlo,Master David le folló el culo y el coño. Cada embestida,acompañada de azotes en las nalgas,hacia que su lengua se empeñara mas en el sexo de su Ama.
Tanta humedad y tanto placer la estaban dejando agotada y la llevaban cada vez mas cerca del orgasmo.
Aguantó como pudo cada follada hasta que se vió en la obligación de pedir permiso para correrse.
-Señor por favor,le suplico me permita correrme y entregarle mi orgasmo.
-Vaya vaya Lady Ann. Me has prestado a un perra muy puta.
-No lo sabes bien,querido,
-Bien puta!. Tienes mi permiso si Lady Ann lo considera oportuno también.
Mientras,seguía embistiéndola ,y cada segundo era una tortura hacia el mismísimo infierno del placer.
Lady Ann fijó la mirada en el rostro de Chloe,sudoroso y lleno de lascivia y lujuria.
-Mmmm... Creo que se lo ha ganado querido Master. Por mi no hay inconveniente.
Fue oír esas palabras,y el cuerpo de Chloe rompió a espasmos y jadeos provocados por ese orgasmo tan intenso.
Su lengua llevo a Lady Ann a otro orgasmo ,que siguió al unísono a la corrida de Master David.
Los tres quedaron rendidos ante semejante fiesta del placer. A Chloe le costaba mantenerse en pie en el potro,así que esperaba que se dieran cuenta y la soltaran.
Lady Ann y Master David,a un lateral de Chloe,hablaban de algo,como si cerraran un trato.
Alguien soltó a Chloe del potro,a la orden impuesta por su Ama. Se levantó y vio de reojo como Master David entregaba a su Ama un fajo de billetes bastante importante.
-A mi Ama le pagan por follarme-pensó Chloe.
Y se sintió orgullosa de haber superado,sin saberlo,otro de sus límites.
nyx de Lady Foc
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