Abrió la nevera y
cogió un brick de leche. Bebió directamente de él y varias gotas
resbalaron por su
escote.
Debía ducharse y
vestirse para ir al colegio.. Hoy tenía examen y no había estudiado
nada. Pero le daba igual. Sabía que lo superaría sin problemas.
Se desperezó y se fue
al baño. Dejó caer el agua tibia por su piel y cerró los ojos.
Acarició sus pechos placenteramente mientras disfrutaba de como el
agua recorría cada una de sus curvas.
Salió de la ducha y se
puso el uniforme . Realmente parecía mas niña de lo que era y eso
le hacía parecer una lolita bastante picarona.
Para variar se le había
hecho tardisimo y llegaría con el tiempo justo al colegio. Estuvo a
punto de perder el autobús por entretenerse en maquillarse.
Cuando abrió la puerta
de clase, ya estaban todos los alumnos sentados y la profesora dando
las instrucciones típicas: solo un boli en la mesa, todo tipo de
papeles o cuadernos en el suelo, mesas separadas.... odiaba los exámenes.
Se sentó en su pupitre
y la profesora la miró con gran desdén.
-Llega tarde señorita
Ibañez. Espero que sepa compensar su retraso adecuadamente.
-No se preocupe Señora.
Disculpe mi tardanza.
La profesora repartió
los exámenes fila por fila y volvió a su mesa desde que la que no
iba a perder ojo del comportamiento de toda esa pandilla que ella
consideraba maleducada y poco motivada.
El reloj comenzó su
tic tac , y durante una larga hora, el silencio se apoderó del aula.
-Les quedan diez
minutos. Vayan terminando sus hojas de examen y déjenlas encima de
mi mesa boca abajo.
No sabía por qué pero
la autoridad que la Señora le imponía, provocaba en ella una
excitación desmesurada e incontrolable. Los pezones se le habían
puesto duros y notaba como entre sus piernas comenzaba a resbalar su
humedad.
Uno a uno se fueron
acercando a la mesa y salieron del aula.
-Señorita Ibañez,
usted espere que tenemos una charla pendiente.
-Muy bien Señora.
Pensó en la
contestación que le había dado a la Señora la mañana anterior y
lo mal que se lo había tomado. Estaba claro que iba a tener
consecuencias.
Cuando todos hubieron
abandonado el aula, la llamó a su mesa y la hizo ponerse delante
suyo.
-¿Usted sabe por que
la he citado no Señorita Ibañez?
-Así es Señora. Y le
pido disculpas por mi comportamiento inadecuado de ayer por la
mañana. No debí haberle respondido de esas maneras. Le ruego me
perdone.
-Muy bien señorita.
Disculpas aceptadas.
Se levantó de su silla
y caminó hasta colocarse detrás de ella. Se acercó a su oído.
-Espero y deseo que no
se vuelva a repetir. Usted sabe de sobra que detesto esas faltas de
respeto en mi presencia. Apoye las manos en la mesa señorita Ibañez.
Sabía lo que se le
venía encima. No era la primera vez que recibía unos reglazos como
castigo a su rebeldía.
Notó como ella agitaba
su regla en la palma de la mano. Su coño parecía una cascada ya
solo con ese sonido y se relamía los labios imaginando el castigo.
Una reglazo estalló
contra sus nalgas que la hizo gritar y morderse la lengua. No se lo
esperaba y encima le había puesto como una perra la sorpresa.
Ella le levantó la
falda y varios azotes en el mismo lado pusieron su culo del color de
la sangre.
-¿No pensaría usted,
señorita Ibañez, que se iba a ir de rositas ante su actuación no?
-No Señora pero siendo
sincera, no me esperaba esto. Supongo que me lo merezco.
Sin dejarle terminar de
hablar, la regla volvió a estallar en sus nalgas. Picaba cada golpe,
,pero a la vez, se sentía orgullosa de haber sido una niña mala.
La prepotencia y altanería era algo que sacaba de los nervios a la
gran mayoría de sus profesoras,, pero ninguna como Ella, era capaz
de domarla.
Perdió la cuenta de
cuantos reglazos recibió.
-Ya hemos terminado
señorita Ibañez. Puede irse.
Se colocó la falda y
con la cabeza bien alta, se dispuso a salir del aula.
Cuando iba a salir algo
la hizo volverse.
-Muchas gracias Señora-
le dijo con una pícara sonrisa.
Abandono la clase y se
fue al baño a masturbarse.
nyx de Lady Foc
No hay comentarios:
Publicar un comentario