...Fue a la habitación
y se calzó los zapatos que Ella hubiera elegido. Cogió un foulard
negro a juego con la falda, el bolso y salió de casa dispuesta a que
no se le palpase ni un ápice de lo rendida que estaba.
Al llegar a la calle,
se puso las gafas de sol, pues le imprimían seguridad en si misma,
al saber que la gente no podía ver a traves de sus ojos.
Sacó el movil de su
bolsillo, se puso los cascos y se sumergió en la música que le
había acompañado estos últimos días: Juan Fernando Velasco.
Al sonar tan sólo el
primer acorde de la primera canción, las lágrimas empezaron a
asomarse en sus ojos..pero NO
Debía ser fuerte,
adapatarse y superar estos días duros; estas pruebas que su deseo
había puesto en su camino. No debía ni podía permitirse llorar.
Presumía de ser como un roble, aunque en el fondo sabía que no era
así. Los sentimientos siempre habían sido algo incontrolable para
Chloe y ésta vez no iba a ser distinto. Pero prefería llorar en
silencio, derramar todo su dolor en la initmidad de su casa, pues era
la única que le quedaba.
Caminó por la calle
ausente y, aunque no sabía cómo, conseguía estar atenta a las
personas y coches que se le cruzaban.
Cuando llegó al
trabajo, ya le estaban esperando para la reunión. Pasó al servicio
y no pudo evitar llevarse los dedos al coño y masturbarse pensado en
Ella.
Sentada allí, en el
suelo del aseo, sabiendo que la estaban esperando y Chloe disfrutando
del placer del recuerdo, se excitaba más y más...sientiendo la
humedad de la que Ella había disfrutado tantas veces..
Metiendo sus dedos poco
en lo mas hondo de su alma, anhelando gritar, subir la cielo, sentir
el paraíso y el infirno al mismo tiempo....Pellizcando sus pezones y
apretando sus pechos..sinetiendose sexy, deseada, anhelada...
Imaginó las manos de
Ella recorriendo cada centímetro de su cuerpo, de su sexo, de su
esencia..
Y llegó..alcanzó el
climax ….viajó al limbo del placer y de la lujuria de su propia
mano..
Entró a la sala de
juntas con total seguridad, pisando fuerte y decidida, y expuso sus
nuevas propuestas con una labia y una sonrisa, para nada concordantes
con las situación. Pero no podía evitarlo...algo de esperanza de
sentirse llena y completa invadía todo su ser.
nyx de
Lady Foc y Lord Fusta
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